Nos habíamos acostumbrado a teléfonos móviles diminutos, pero las pantallas táctiles han vuelto a hacer crecer a los smartphones. Aunque son móviles muy delgados, para muchos usuarios siguen siendo auténticos ladrillos. Encima esas pantallas tan hermosas son demasiado delicadas y pueden acabar quebrándose con facilidad. El adiós al smartphone de estilo ladrillo está cerca. Se avecina un cambio de generación en los móviles, de la mano de las pantallas flexibles. La industria se prepara para abandonar las pantalla rígidas, y saltar del LCD al OLED.
Es cierto que ya existen en el mercado terminales móviles de alta gama con pantallas OLED (Organic Light-emitting Diode). Es el caso de ciertos smartphones de Samsung que como él último Galaxy S III, incorporan una pantalla AMOLED, que es la modalidad de matriz activa del OLED. Sin embargo, esas pantallas todavía son rígidas. Durante la pasada feria CES 2012 en Las Vegas, compañías comoSamsung y LG mostraron prototipos de smartphones con pantalla flexible. Donde el LCD no puede llegar, el plástico orgánico del OLED consigue formas poco habituales y dispositivos móviles con pantallas más resistentes.
Esas nuevas formas para smartphones más duraderos van a impulsar la adopción de pantallas flexibles por parte de la industria de los teléfonos móviles. El pasado mes de mayo, Samsung anunciaba que iba a fabricar cerca de un millón de pantallas flexibles dentro de este año, con la idea de lanzar un teléfono móvil flexible para finales de 2012. La coreana además adelantaba que en julio iniciaría la producción. Ahora, el diario coreano DDaily acaba de confirmar que Samsung empezará a fabricar pantallas AMOLED flexibles a gran escala este mismo trimestre, en concreto, dentro de menos de una semana.
Esa primera hornada de pantallas AMOLED flexibles, ya no van a tener un substrato de cristal, sino de plástico. Con eso, se va a aumentar la durabilidad y se va a reducir el grosor y el peso. Así, los paneles Super AMOLED actuales, que son rígidos, miden 1,8 milímetros de grosor, pero los nuevos AMOLED flexibles adelgazarán dos tercios para quedarse en sólo 0,6 milímetros de grosor. Eso va a permitir comercializar smartphones más ligeros. Ahora bien, esta primera generación de pantallas AMOLED todavía no va a ser verdaderamente flexible, porque va a llevar una capa protectora de cristal en el frontal,
El departamento de investigación y desarrollo de Samsung sigue trabajando para buscar un sustituto para esa capa protectora de cristal en el frontal que permita la producción a gran escala. El objetivo final es lograr una pantalla AMOLED completamente flexible, que se pueda curvar y enrollar. Según DDaily, no será hasta finales del año 2014, cuando la compañía empiece a producir paneles AMOLED realmente flexibles. Según diversos analistas, como los de Lux Research, el futuro de los smartphones pasa por las pantallas OLED flexibles. De todos modos, la tecnología todavía no está lo bastante madura, y al principio sólo va a estar presente en el 15 por ciento de los móviles. De aquí al año 2017, las previsiones vaticinan 120 millones de dispositivos móviles con pantalla flexible.
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