El pasado 22 de septiembre, iFixit hizo exactamente lo que suele hacer: cogió un dispositivo y lo desmontó. Por desgracia, el dispositivo elegido ese día resultó ser la nueva Apple TV, que todavía no había salido a la venta (su lanzamiento tendrá lugar en algún momento durante este mes de octubre).
En su momento, Apple envió a algunos desarrolladores seleccionados, entre ellos iFixit, una unidad de la nueva Apple TV para que pudieran tener listas aplicaciones para tvOS antes de que el dispositivo saliera al mercado. Una de las condiciones que impuso Apple a estos desarrolladores es que no podían publicar ningún tipo de análisis del producto.
Por supuesto, en iFixit eran plenamente conscientes de que en Apple posiblemente no iba a hacerles mucha gracia que desmantelaran la Apple TV antes de su lanzamiento, pero, una vez sopesados los riesgos, decidieron ignorarlos y siguieron adelante con sus propósitos: desmontar la Apple TV y el mando Siri Remote, analizando cómo estaban hechos por dentro; y es que, como dicen ellos mismos, lo de desmontar aparatos lo llevan en el ADN, y no pudieron resistir la tentación.
Por desgracia para iFixit, la decisión llevó a que Apple no sólo cerrara la cuenta de desarrollador que utilizaban, sino que además la aplicación oficial de iFixit ha desaparecido de la App Store, ya que estaba ligada a la cuenta de desarrollador.
En lo que se refiere a la aplicación, iFixit ha declarado que no tienen planes de reincorporarla a la App Store, ya que el pequeño equipo ha estado trabajando en la versión para móviles de su web, para así poder seguir mostrando al mundo, también por este medio, cómo desmontan todo dispositivo electrónico que cae en sus manos.
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